jueves, 19 de febrero de 2009

Maldades

No vayan a malinterpretarme. No se trata de ningún tipo de fijación insana. Es más una cuestión de mera auto-identificación, como talla. Es que nosotras las tallascuarentas nos reconocemos en la distancia. Sabemos que estamos ahí, aunque nos machaquen, aunque nos escondan. Tendemos a estar. Siempre. Y yo a esta chica la huelo, sé que es de las mías. Muy hortera, pero tallacuarenta hasta la médula. Un ligerito paseo por su pasado estético basta.


Y otra maldad de talla-que-acumula-rencor: isshhhh, si es que lo tengo dicho, hay que cuidarse mucho de repetir vestidiiito, que luego las comparaciones son odiosas, y más contra diosas como Halle Berry. No me extraña que Jennifer se escape de la foto. *Nota: ciertamente, el vestido tampoco es la leche de favorecedor, las cosas como son.


Pero para que vean que no todo son dardos envenenados en el planeta cuarenta, aquí un claro caso de compañera que da ejemplo al mundo y demuestra que, bien trabajada, una prieta-tallacuarenta puede evolucionar a sobria y elegante SEÑORA Tallacuarenta.



Y bueno, no tan sobrio, pero aquí otro caso de trabajado tallaje. Para que luego digan que no soy expléndida...

lunes, 9 de febrero de 2009

Pe-drey Herpburn

Atención, pregunta....



A quién quiere parecerse Pe??

tic-tac-tic-tac.....

jueves, 5 de febrero de 2009

Plegándonos

¿Qué pasa con los plieguecitos? No sé si han dado cuenta, pero ahora los escotes en plan abanico de papel son lo más. Para ir de fiesta, se entiende, porque no veo yo la tendencia muy para autobús o metro. En la entrega de los Goya desde luego arrasó el corte-acordeón este; lo pudimos ver en humanas variadas como la Misteriosa Mujer de Amarillo, Malena Alterio o pseudo-Dita Vega.


Es un poco como meterse en un saquito y tirar de la cuerda que lo cierra; también podría pensarse que nos ha dado por envolvernos en papel de caramelo y llevamos el escote estratégicamente escondido bajo los volantes de celofán...

...pero algo me hace pensar que en realidad este look tan ñoño es secretamente práctico para la condición tallacuarentosa: con sus pliegues, sus volúmenes, su holgura, su todo. Con tanto frunce se pierde noción de la lorza, fijo.

Tengan ustedes feliz resto de semana.

domingo, 1 de febrero de 2009

Barriendo las aceras

Humanos y humanas de bien, observen con detalle los bajos de los pantalones de estas dos criaturas celebérrimas:


Ambas celebran el exceso de tela en sus vestiduras sin complejos.
¿¿Coincidencia??
No lo crean. El Universo Celebrity atiende a un perfecto engranaje secreto de reglas oscuras que todos desconocemos pero que manipulan las tendencias del planeta a conciencia. Cuando una mariposa bate sus alas en Japón, Angie arrastra sin piedad su traje sastre en Berlín y Jessi limpia devota las aceras de Hollywood con sus pantacas. Esto es así. Ya están ustedes tocados por el poderoso influjo del momento lo-lleva-la-famosa y no hay vuelta atrás. Cuando quieran darse cuenta, se encuentran con un pantalón roído y lleno de mierda a sus pies. Pero con mucho estilo. Porque ahora se lleva. Y mola.

Feliz semana